“Malta representa un lugar clave para las migraciones”

Durante la audiencia general el Papa recordó su último viaje internacional. Fue a Malta y dijo que es un lugar “fundamental para el fenómeno de las migraciones, pues Malta es un laboratorio de paz, donde se acoge a los migrantes con un espíritu de fraternidad”.

Queridos hermanos y hermanas:

El sábado y domingo pasados finalmente pude realizar el Viaje apostólico a Malta, país que, como nos lo recuerda el libro de los Hechos de los Apóstoles, recibió el primer anuncio del Evangelio del mismo san Pablo. Él, habiendo naufragado cerca de esa isla, encontró, junto con sus compañeros de viaje, acogida y refugio de parte de los malteses, que les «mostraron una cordialidad fuera de lo común», una “rara humanidad” (28,2).

Estas palabras las escogí como lema de mi viaje porque indican la vía a seguir para afrontar el fenómeno de los migrantes, pero también para que nuestro mundo sea más fraterno, más vivible y pueda salvarse de un “naufragio” que nos amenaza a todos, recordando que “estamos en la misma barca”.

Malta representa un lugar clave, primero, porque situada en el Mediterráneo, entre Europa y África, es zona de encuentro de pueblos y culturas. Una nación pequeña, llena de historia y civilización, que debe animar a las naciones poderosas a seguir la lógica del respeto de la libertad y la convivialidad de las diferencias.

Además, es fundamental para el fenómeno de las migraciones, pues Malta es un laboratorio de paz, donde se acoge a los migrantes con un espíritu de fraternidad, compasión y solidaridad. Por eso, como Obispo de Roma quise venir para confirmar a los malteses en la fe y en la comunión, e invitarlos a emprender una nueva evangelización, esencial para reavivar su fe y alegría en Jesús.

Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española. Agradezco al Señor haberme permitido realizar este Viaje apostólico a Malta y también por todos los misioneros que desde esa nación han llevado al mundo el testimonio del Evangelio. Que Dios los bendiga. Muchas gracias.